Sé que estás cansado, pero ven…
Este es el camino.
-Rumi
*
El cansancio ya abruma, pero queda desbrumado con la sola mención de Su sombre y los dulzores de Su recuerdo, cálido y reconfortante.
El cansancio y abruma, pero queda desbrumado con la sola atención plena y consciente en la eternidad del instante.
El cansancio y abruma, pero queda desbrumado con un mero vislumbre de Ella, que deslumbrante se muestra, y que hace que todo reasuma el frescor de sus cristalinas y refrescantes aguas.
El cansancio y abruma, pero queda desbrumado cuando uno comprende que por Su ser eterno e incondicionado, lo efímero y contingente se desvanece en el espejismo de su propia irrealidad, cual irreales arcoíris que aparecen y se desvanecen.
Ella hace que lo igual se una a lo igual, y que las fuentes del amor y de la belleza puedan volver a manar de nuevo, inobstruidamente.
Ella es el frescor de las fuentes del paraíso y de los arroyos fluyentes, y es la belleza misma depositada y ocultada en las Huríes, que anhelantes aguardan tu llegada.
¡Allahu Akbar!