En el amanecer
De un nuevo amanecer deslumbrante,
De instante a instante amanezco.
*
La roca de mi refugio
Es el espacio increado
De la vastedad primigenia,
En la luminosidad de base auto-irradiada.
¿Acaso habré de temer a los muertos?
¿Acaso habré de temer a los terroristas del gobierno?
*
Yo vivo eternamente,
Porque en el espíritu de lo no-nacido
Moro.
*
El resplandor deslumbrante de la mañana
Me sume en el olvido de mi irrealidad,
Y entonces recuerdo.
-despojosdeoccidente
COMENTARIO:
Es muy importante tomar consciencia, o darse cuenta, de que lo que hay que salvar es el alma (la psique individualizada sobre el soporte material del cuerpo), y no el cuerpo, el cual no es más que el recipiente vacío de la luz de la consciencia que Allah vierte sobre sus criaturas, para que sus criaturas sean agradecidas y el agradecimiento les lleve al amor y el amor les lleve a trascender lo que no es Allah, es decir, el mundo perecedero que Allah alumbra con el fulgor deslumbrante de la luz penetrante de Su Noble Faz.
Si sabemos esto podremos afrontar las acometidas de los terroristas del gobierno sin miedo y morir con la cabeza orgullosamente alzada delante de nuestros enemigos, insometidos a la bestia y a sus designios, es decir, sin haber tomado la ponzoña que llaman “vacuna” covid y sin respetar sus criminales normas de distanciamiento social y confinamiento.
Por desgracia, la mayoría de la gente, no ya del ganado humano, sino de los mismos despiertos negacionistas, cuando arrecie la persecución de los terroristas y cada vez estén más arrinconados, más despreciados y más segregados de la sociedad, accederán al sello de la bestia y contaminarán su sangre con la sustancia inmunda. Empero, un puñado de hombres verdaderos basta para sujetar la cuerda de la misericordia de Allah hasta el final y que las últimas almas que tienen que ser salvas, se salven.
FIN